La Iglesia mexicana hizo un llamado este domingo para garantizar que cada niño en el país tenga acceso a la educación y una vida libre de explotación laboral, mediante políticas públicas que protejan y promuevan los derechos de la infancia. En su editorial dominical Desde la Fe, la Arquidiócesis de México destacó la importancia de no limitar la reflexión sobre el trabajo infantil al Día Mundial contra el Trabajo Infantil, conmemorado el pasado miércoles.
Según datos de la Encuesta Nacional de Trabajo Infantil (ENTI) de 2022, al menos 3.7 millones de niños y adolescentes en México están atrapados en el trabajo infantil. La agencia de las Naciones Unidas ha señalado que este fenómeno está en aumento debido al incremento de la pobreza absoluta entre las familias mexicanas.
La situación es particularmente grave en estados como Guerrero y Chiapas, con tasas del 24.5% y 20.8%, respectivamente, donde niños de tan solo 11 o 12 años se ven obligados a trabajar para sobrevivir. La Iglesia cuestionó las acciones actuales para proteger a los niños y garantizarles un futuro mejor, instando a todos a hacer esfuerzos significativos para promover y defender los derechos de la infancia.