Roberto Carlos conquistó anoche el corazón del público regiomontano con un concierto cargado de emociones, recuerdos y romanticismo en la Arena Monterrey. Como parte de su gira “México 2025”, el cantautor brasileño ofreció un espectáculo en el que celebró tanto a los maestros como a las madres, en el marco de fechas especiales para ambos sectores.
Éxitos de toda una vida
A sus 84 años, el llamado “Rey de la balada romántica” demostró que sigue vigente y con plena energía sobre el escenario. Durante más de una hora, interpretó una selección de sus éxitos que han marcado varias generaciones, entre ellos Lady Laura, Amada amante, Mi querido, mi viejo, mi amigo, Detalles y Un millón de amigos.
La Arena Monterrey lució llena de admiradores que corearon cada canción con entusiasmo. En el ambiente se respiraba una mezcla de nostalgia y celebración, con asistentes de distintas edades, muchos de ellos acompañados por sus madres, quienes recibieron este concierto como un regalo especial.
Repertorio del concierto
El momento más ovacionado llegó con Amigo y El gato que está triste y azul, interpretaciones que provocaron lágrimas y abrazos entre el público. Las baladas predominaron durante la velada, aunque también hubo espacio para temas más rítmicos que animaron a los asistentes a cantar y moverse al ritmo del artista.
Su legado sigue intacto
Con su estilo inconfundible, Roberto Carlos ofreció una velada inolvidable que reafirmó su lugar como uno de los grandes de la música en español y portugués. Su presentación en Monterrey fue, más que un concierto, un homenaje al amor, la amistad y el poder de la música para unir generaciones.